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Puede que incluso a veces, un reseteo resulte óptimo para que el sistema siga cumpliendo con todas sus funciones. Y nuestra forma natural de restaurar sistema es hacerlo mediante el descanso. Dormir bien y las horas suficientes durante la noche, y poder hacer una breve siesta – al menos media hora – o relajarnos durante un rato a media jornada, son la clave para no sentir que nos invade el agotamiento.
A fin de cuentas, todos los mamíferos se relajan después de comer…Pero si un breve parón no fuese posible durante el día, descansar por la noche sí debe ser del todo obligado.
Las horas de sueño nocturno son esenciales si queremos afrontar un nuevo día llenos de energía, con nuestras “baterías” bien cargadas. Mientras dormimos, nuestro metabolismo se ralentiza para permitir la relajación total de los músculos, siendo el sueño el mejor método reparador para sus tejidos, pues durante las distintas fases del sueño, éstos se regeneran. ¡Ahí se encuentra la importancia del descanso! Acelerar esto es uno de los beneficios de la presoterapia.
Y aún hay muchos más beneficios para nuestra salud cuando dormimos al menos 8 horas diarias. Si bien no hay resultados concluyentes sobre el mínimo de horas de sueño obligadas, vamos a centrarnos en las 8 horas mínimas como referencia, aunque hay personas que durmiendo bien 5-6 se sienten ya recuperadas.
Dormir nos proporciona un estado general de bienestar con efectos positivos en nuestra memoria y capacidad de concentración, además de fortalecer el sistema inmunitario y reducir la presión sanguínea o la inflamación, sin menospreciar que también nos sentiremos con más energía y mejor humor.
Si descansamos mal también afecta en la subida de peso, provocando que nuestro cuerpo segregue una hormona que incrementa tu apetito, y esto se debe a que la parte de tu cerebro que controla el sueño, es la misma que se encarga de regular el metabolismo.
Nuestros patrones de sueño, a menudo rotos por el ritmo frenético de nuestras vidas o debido a las muchas preocupaciones en nuestra mente, pueden desembocar en un estado de estrés que se convierta en algo crónico con terribles consecuencias para ambos, cuerpo y mente.
Ninguno de estos sistemas, totalmente interconectados, funcionarán bien si no les damos la importancia al descanso que se merece. Si llevamos mucho tiempo durmiendo mal por las noches, sin desconectar totalmente.
Sintiendo que no hemos alcanzado realmente el sueño profundo sino que hemos pasado toda la noche agitados y en estado de duermevela – medio despiertos, medio dormidos – es más que probable que nos levantemos sintiendo que nos ha pasado un camión por encima. ¡Qué importante es descansar!
No sería extraño sufrir de dolorosas contracturas en la espalda o sentir que las piernas nos pesan como costales de harina. El asunto es serio y no debemos infravalorar estos avisos. Seguramente sean síntomas de un trastorno en el sueño que debería ser consultado y tratado con nuestro médico, antes de convertirse en algo severo.
Una mente y un cuerpo que no descansan, serán tarde o temprano, una mente y un cuerpo enfermos. ¡No esperes más a darle importancia al descanso!
Y muchas son las dolencias que podemos llegar a sufrir como consecuencia de un descanso deficiente:
En ocasiones, llegamos a casa después de una intensa jornada de trabajo tan cansados, que nos iríamos directamente a la cama, pero esto casi nunca es posible, pues solemos seguir activos todavía un buen rato antes de abrazarnos a la almohada. Sería conveniente por tanto, adoptar una serie de patrones que nos ayuden a entrar en “modo relax” y nos pongan a punto para caer plácidamente en los brazos de Morfeo:
En conclusión, intentar encontrar un equilibrio que mantenga un estado de bienestar físico y mental es primordial para tener un buen descanso.
Sí, tu equipo SIZEN puede ser también un aliado perfecto a la hora de descansar. Cualquiera de los accesorios ha sido diseñado para proporcionarte un masaje completo y profundo, capaz no sólo de reconducir los fluidos estimulando el sistema linfático, sino que además tiene un efecto relajante que distensiona tus músculos.
Ya sea a media jornada, en un breve paréntesis de descanso o bien por la noche, antes de irte a dormir, ponerte “en manos” de SIZEN puede ayudarte también a la hora de coger el sueño, ya es hora que le des importancia al descanso. Cerrar los ojos mientras te concentras en el masaje o disfrutar de una buena serie mientras se efectúa la sesión de presoterapia (la definición de presoterapia), también te ayudará a entrar en un estado de relajación previo al sueño en el que ya deberías encontrarte mucho más descansado.