Cómo hacer un drenaje linfático en casa
Eliminar toxinas y grasas, así como reducir la celulitis y las varices, mediante un simple masaje en casa es posible. Tras hacer esta afirmación, cabe dejar claro que no existen remedios mágicos, extremadamente sencillos y con beneficios increíbles. Si bien, el drenaje linfático es una técnica científicamente testada que favorece la pérdida de peso y la desintoxicación del organismo, lo cual puede funcionar de manera complementaria al incremento del ejercicio físico y la adopción de una dieta saludable.
¿En qué consiste un masaje linfático?
El drenaje linfático es una técnica de masaje que persigue estimular la red de vasos y ganglios linfáticos para que se produzca una correcta depuración de las toxinas y líquidos corporales, incluidas las grasas, mediante la eliminación del líquido intersticial, el exceso de líquido. Parte del agua corporal se destina a la formación del llamado líquido linfático o linfa, juntamente con las toxinas que liberan las células. Por ello, es importante drenar estos desechos celulares. En este sentido, el masaje linfático proporciona múltiples beneficios y colabora con la limpieza y la desinflamación.
Por otro lado, aporta beneficios en ámbitos independientes a la pérdida de peso. El drenaje linfático también estimula el sistema inmunitario, favorece la regeneración de los tejidos, acelera la cicatrización y la recuperación, es relajante para el sistema nervioso, ayuda a la piel a verse más clara y luminosa y ayuda a absorber edemas.
Cómo se hace un drenaje linfático en casa, paso a paso
Para realizar un masaje linfático no es estrictamente necesario acudir a un fisioterapeuta ni a un centro con la mejor maquinaria de última generación. Es posible llevarlo a cabo en casa, siguiendo correctamente las instrucciones que presentamos a continuación:
- Masajea los laterales superiores del cuello, debajo de las orejas, con las yemas de los dedos, realizando pequeños círculos en el sentido de las agujas del reloj. Allí se encuentran las cadenas ganglionares.
- Masajea la clavícula, en los huecos, entre el cuello y los hombros. Presiona suavemente con los pulgares y estíralos hacia arriba.
- Masajea el plexo solar, en el esternón. Coloca las dos manos, respira profundamente y presiona hacia abajo al exhalar. Así relajarás el diafragma. Masajea las ingles. Presiona con una mano en cada lado y masajea haciendo círculos en distintos puntos.
- Masajea la parte posterior de las rodillas. Con la misma técnica que en el paso anterior, presiona estas zonas donde residen diferentes nódulos linfáticos poplíteos.
Drenaje linfático profesional en casa con la presoterapia
Otra manera más profesional de realizar un masaje linfático en casa es mediante la presoterapia, una técnica terapéutica que consiste en la aplicación de presión de aire controlada. La combinación de compresión y relajación con la ayuda una máquina especializada potencia los beneficios del drenaje linfático.
